El no asumir responsabilidades está llevando a unos niveles de insatisfacción a todas las personas a día de hoy. Este hecho hace que el resto de compañeros se contagien de esta enfermedad y que lleve a una productividad bajísima.
En toda mi experiencia profesional no he conocido casos de despidos por equivocaciones, sin embargo si he vivido situaciones desagradables cuando "compañeros" han tirado balones fuera y no han colaborado.
Esta situación de baja productividad es real y en parte es debida a todos nosotros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario